Estallido social en cuarentena de Coronavirus: Cesan las protestas, aumenta la tensión social

26 Marzo 2020

Yo sólo espero que este gobierno pueda mutar y convertirse en un buen gobierno y nuestra nueva constitución mute en una en la que prime el bienestar de la ciudadanía y no los bolsillos de los privados.

Francisca Gambo... >
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Si el plan maquiavélico de este gobierno era dejar entrar rápido a este bichito al país para menguar las protestas masivas en las calles, creo que está resultando al revés. Pues, quedaron a la vista y en evidencia muchas más falencias en nuestro sistema de lo que cualquiera podría haber previsto, privilegiando siempre a las empresas y pasando por alto cualquier rol social del Estado. Hoy nos sobran argumentos para aprobar un cambio de paradigma en nuestro país.

En las calles se reclamaba por la privatización de la salud y las carencias con las que sobrevive nuestra salud pública, y pues, la llegada de esta pandemia dejó a vista desnuda la precariedad del sistema público y la desfachatez con que las decisiones se toman en beneficio de las isapres, sus clínicas y farmacias, dejando a la deriva a las personas.

Mientras el día 22 debería haber sido la marcha por el agua y el 23 de marzo la marcha por la vivienda, un diminuto virus dejó en cuenta que: "no todos podemos lavarnos las manos porque no todos tenemos acceso a agua" y "no todos podemos quedarnos seguros en casa, porque no todos contamos con nuestra propia casa".

El 31 de marzo estaba prevista la marcha No +AFP y seguramente por la emergencia sanitaria las calles estarán vacías, mientras dentro de nuestras casas todos vemos que nuestros ahorros cayeron abruptamente tras la crisis, obviamente sin afectar sus utilidades.

Las farmacias saqueadas nos saquean, pues congelar los precios es "inconstitucional" y los grandes privados obligan a trabajar, pues prohibirlo podría ser "inconstitucional". El virus llega a Vitacura y Las Condes, pero han muerto en Renca y Maipú.

El COVID-19 nos obligó a ver una desigualdad de la que todos hablábamos como un secreto a voces, y es que mientras el cono oriente de la capital de más altos ingresos trae consigo este virus, lo propaga inconcientemente, sabiendo que su salud está resguardada tras su poder adquisitivo, los perjudicados siguen siendo los mismos de siempre, el otro 94%, el que se gana el pan día a día, al que despiden si no va a trabajar, el que debe tomar el transporte público (que el lunes más que nunca demostró que de público no tiene nada). Mientras un grupo minúsculo se toma estas viru-vacaciones en sus casas de la playa, otra gran mayoría piensa en que malabares hacer para llegar a fin de mes y quien recrestas le ayudará a cuidar a los niños.

La educación mostró sus propias desigualdades, viendo a los profesores como un trabajador de empresa privada más que debe cumplir horarios y otorgando educación online solo a quienes tienen acceso a un computador e internet.

Y la economía se nos va a las pailas... lo que es obvio con nuestro actual modelo económico neoliberal y extractivista. Vender nuestros recursos naturales a bajos precios y dejar que otros industrialicen, manufacturen y comercien, dejando esa regulación a una "mano invisible". Empresa-Estado, salud, agua, vivienda, AFP, (auto) regulación del mercado, desigualdad social, educación, economía. Me falta medio ambiente (y mucho más).

Un tercio del mundo se encuentra en cuarentena y esto ha permitido que la emisiones de CO2, disminuyan al menos en un 25%, las aguas de Venecia se volvieron claras tras la ausencia de góndolas y vaporettos y los animales silvestres volvieron a los lugares que un día fueron su hogar. Un gran respiro para el planeta.

Mientras tanto, la primera medida del gobierno fue ponerle precio al examen, la gran medida fue un toque de queda, la medida estrella arrendar Espacio Riesco por 26 millones diarios y la guinda de la torta nos la regaló el ministro de salud, revelándonos que el "el virus puede mutar y convertirse en buena persona"... yo sólo espero que este gobierno pueda mutar y convertirse en un buen gobierno y nuestra nueva constitución mute en una en la que prime el bienestar de la ciudadanía y no los bolsillos de los privados.

La protestas se detienen porque sólo nos queda cuidarnos entre nosotros, que el encierro voluntario nos sirva para observar objetivamente nuestra realidad, para repensar el Chile que queremos. Y ya que no podemos salir, aprovechemos de mirarnos hacia adentro. Que esta situación nos sirva como oportunidad de transformarnos en el ciudadano del Chile que soñamos, más solidario, menos individualista y más compasivo con el que lo más lo necesita.