"Estar acá me da mucha nostalgia": Pedro Carrizo, un arquero que hizo historia en San Marcos de Arica [VIDEO]

Cuando hablamos de las historias que se han escrito con la camiseta celeste de San Marcos de Arica, recordamos partidos épicos y jugadores importantes que nos entregaron alegrías. Ellos siempre "saltan a la cancha" de la memoria cuando nos sentamos a charlar de fútbol en un bar.

Hay muchos referentes que ya nos han dejado, pero hay otros que siguen demostrando que el cariño por la ciudad. Y el reconocimiento es mutuo, más aún si el cerrojo del arco era custodiado por él: un hombre que no se achicaba con nadie y que, justamente, su grito "¡ACHICA!" era respeto y orden. 

Con esta reseña iniciamos la conversación con son Pedro Alex Carrizo Córdova, realizada en la previa del partido del domingo pasado, donde Los Bravos superaron a los Microbuseros por 2-1.

- ¿Cómo es el regreso a la ciudad, Pedro?

"Para mi estar acá me da mucha nostalgia. Fueron 5 años que estuve. La playa, el sol y, sin duda, hay un cariño especial que le tengo a la ciudad. Me llamó la atención el Mall y unos departamentos por el lado sur; me alegra mucho que la ciudad esté creciendo, se ve más linda".

- Ahora estás desde la otra vereda, ¿San Marcos de Arica vs Santiago Morning es (fue) un partido especial?

"Obviamente que va a ser especial, no puede ser un partido más para uno que formo parte de este club, que quedó en la historia. Quiero disfrutarlo al máximo. Además, el cariño de la gente siempre está. De hecho, hoy fui a dar una vuelta a la playa y la gente me saluda con mucho afecto".

- Cuando hablamos de frases futboleras, hay una que cuenta que "el fútbol jubila a los jugadores". En este caso, tú decides hacerlo antes que el futbol te jubile a ti. Conociendo el gran potencial que tienes, ¿por qué te retiraste y volviste?

"Me retiré un poco por las circunstancias que en ese momento estaba viviendo: no era considerado por el proyecto del entrenador. Me llamaron de diferentes equipos, como Cobreloa, Cobresal y San Antonio, entre otros, y la verdad que ninguno me daba la seguridad para poder irme; ninguno me convenció hasta que se dio la oportunidad de estar en La Serena".

- ¿Crees que la salida desde el club ariqueño, no fue de la forma que esperabas?

"Claro, sin duda, pero es que tú sabes que aquí uno es jugador. En ese tiempo llegó un técnico y creía que lo mejor para el club era traer sus jugadores, el directorio tenía que apoyarlo y uno entiende y se respeta. Yo si doy fe que agoté todos los recursos para poder quedarme, aún bajándome el sueldo, pero si tú no formas parte de un proyecto, es muy difícil seguir".

Todo un "Bravo"

- Una pregunta desde la galería por Luis Bustos. En 2011 llegas con mucho tiempo sin jugar, pero cuando tomas el arco no lo sueltas más, ¿qué recuerdas de esa etapa?

"Esa vez recuerdo que hice una muy buena campaña con Antofagasta y el profe Hernán Ibarra llega a Arica me llama para formar parte del plantel. Para mala fortuna, me lesioné de la rodilla y alcancé a jugar el último partido contra Magallanes. Pero no sería hasta la llegada del profe Luis Marcoleta que me hizo jugar. Ahí, a través de los partidos, se me afirma la rodilla y termino haciendo una muy buena campaña".

- ¿Qué significa el profesor Luis Marcoleta en tu carrera?

"Para mí es una persona muy especial, porque son pocos los técnicos que hoy en día te marcan como persona y jugador. Nos entregaba buenos valores, sólo tengo palabras de halago. Es más, los logros que conseguimos lo obtuvimos con él. Cuando nos comprometimos a ascender, él decía 'que dependía de nosotros quedar en la historia del club, de no pasar desapercibido, sino de dejar una huella'".

- ¿Con que compañero al pórtico ariqueño tienes tus mejores recuerdos?

"Con muchos. Deschamps y el 'Huaso' Muñoz, ahora compañero en el Morning, donde seguimos siendo muy buenos amigos. Ya con una relación distinta, fue con Eduardo Lobos; si bien tuvimos varios encontrones, porque somos de carácter un poco más fuerte, nunca nos faltamos el respeto.

Pero una relación especial tengo con Zacarías (López), es como mi hijo, siempre se lo he dicho, desde cuando estaba chiquito. Recuerdo que andaba con las rodillas llenas de  tierra. Desde que lo conocí, siempre le tuve un cariño especial y hasta hace poco que estábamos juntos en el equipo con La Serena. De hecho, estuvo viviendo en mi casa".

- “¡Achicaaaaa!”. Tu palabra ícono, sin duda.

"Era la frase típica mía. De todas las cosas que gritaba, una de los momentos que me acuerdo fue cuando CDF, en un partido contra Wanderers, realizó un compacto sólo con mis gritos a los defensas para ordenarlos. Salió muy divertido. Siempre me caractericé por eso, me exigía al máximo en mi puesto, también en gritar y ordenar a los muchachos".

- ¿Cómo llegaste a ser capitán del Bravo?

"Fue de forma natural. Rcuerdo que estaba Joel (Estay) antes que yo y el profe en un partido me designa capitán. Después se fue dando poco a poco. Creo que lo que reforzó la capitanía fue el hecho de que jugaba más partidos, hasta que ya al último le entregué la jineta a Barrios (Augusto), pues quería darle ese apoyo y esa importancia que tenía él en ese momento para el club. Yo siempre le dije 'Negro, tú tienes que ser el diferente, eres el único ariqueño en la cancha”. Así fue como le di esta hermosa responsabilidad".

Historia viva

- ¿Cuál es tu sentimiento al saber que eres parte de la historia del club, que eres parte de la historia viva celeste?

"Uno como jugador va grabando cosas en su interior, marcando cosas en la carrera y una de las más hermosas que he vivido en el futbol, fueron aquí. Es recíproco. Para mí es una historia muy linda que la tengo adentro, es un club que le tengo mucho cariño".

- Hay muchos partidos iconos. En el 2015, tras largos años, regresa uno de los más grandes goleadores de Chile al Monumental. Todas las cámaras y un estadio lleno enfocadas en un solo hombre. Minuto 34', penal para Colo Colo. Desde los 12 pasos toma el balón Humberto Suazo. El “Chupete” disparó hacia la izquierda y en gran forma atajas, provocando el despeje de la defensa, haciendo estéril el grito de gol albo.

"Yo estaba en el arco sur con la barra ariqueña detrás. En ese momento lo único que pensé era que 'Chupete' no le pegaba fuerte a la pelota, así que no me la iba a cruzar. Lo esperé y me lancé donde pensé que podía disparar. Todo el estadio quedó en silencio. Ellos esperaban el gol después de mucho tiempo fuera. Luego vi los videos desde la barra sobre cómo lo vivían desde afuera y es bonita la sensación del hincha".

- En el 2014, en el Estadio Nacional frente a Universidad de Chile, se hablaba que Arica estaba siendo damnificada por dudosos cobros arbitrales y, tras expulsión, Carrizo se descarga contra el árbitro.

"Hace 4 fechas que nos venían cobrando cosas que eran sumamente injustas. Obviamente, estaba muy ofuscado, porque me habían expulsado, ya que en la jugada anterior al penal de la U, uno de nosotros remata en arco azul, pegando en la mano a uno de ellos, sucediendo algo parecido al penal que cobró contra nosotros. Ahí fue cuando le dije al juez 'hace 4 fechas que nos vienen cagando', entre otras cosas. Era más que nada la impotencia, ya que al no ser un 'Equipo Grande' tenías que ir a luchar no sólo contra un equipo, sino que contra muchas cosas más".

- ¿Es la identidad de Pedro Carrizo, ser la voz de los que muchos tienen miedo de hablar?

"Es mi temperamento, mi carácter y mi esencia. Si tengo que decirle algo fuerte a alguien, se lo digo y no me importa nada. La injusticia siempre va estar, pero si tú te quedas callado, en mi manera de pensar, no me siento bien. No puedo ir a jugar a Santiago y que me caguen con el arbitraje para quedarme callado. Al final siempre te cuesta caro. En Copa Chile, jugando por La Serena, todo Chile se dio cuenta que a Colo Colo lo ayudaron; nadie decía nada, encaré al árbitro y terminé epulsado con 5 fechas de castigo". 

- Última fecha y gran final. En el 2012 se jugaba el ascenso a estadio lleno. ¿Qué significa ese momento para ti?

"Ese momento nunca se va a olvidar. Te puedo asegurar que después cuando volvimos a subir no fue lo mismo. Es que la primera vez fue tras largos 27 años, íbamos a quedar en la historia.

Concentramos en el hotel Diego de Almagro la noche anterior y el profe Marcoleta invitó a nuestras familias a la charla para ser partícipe de ésta. La motivación era enorme, la felicidad que podíamos causar a toda una ciudad la asumimos tan bien, que nos sentíamos plenos, llenos y contentos, todo el equipo por el mismo objetivo.

Uno de los momentos que se me quedaron grabados fue cuando el árbitro termina el partido. Miraba el estadio y no lo podía creer. Cuando levanté la Copa me subieron arriba de una silla entre el 'Flaco' y el 'Paragua'. Creo que que no fue necesario el escenario de la ANFP, las guirnaldas y el cotillón, ni la televisión, lo que vivieron los hinchas junto al equipo fue un momento sólo para nosotros".

- La alegría del ascenso, ¿cómo lo vivía el grupo?

"Era una locura total. Recuerdo que nos fuimos en un camión, que lo adaptaron para estar arriba: el “Paragua” (Pedrozo) en el techo, los bombos, la gente en la plaza, las banderas. Siempre recuerdo las estadísticas y veíamos que teníamos las mayores asistencias en los estadios de Chile; Arica siempre estaba tercero o cuarto.

Todo lo que hacían con los globos celestes, para uno que viaja a otros lados, nos emocionaba. Esas cosas no se ven. Y lo mejor: La gente siempre trataba de achicar a los equipos que venían de visita, en especial a los de la capital, y eso nos encantaba".

Pedro Carrizo saluda a los hinchas de San Marcos de Arica